...::: ╬ Closure ╬ :::... El Canto del Fénix

"Señor Arien” que palabras tan extrañas cuando de su voz escucho mas de una vez el amor que le sentía, pero da gracias, mil gracias de que ya no lo recuerde, no volverá a escuchar esas palabras viniendo de otro joven, ya no volverá a escucharle cantar o hablar con palabras dulces y esa voz tan suave… tenia que olvidarlo, no podía estar cerca de el

Ya no había dicho nada ya no tenia nada que decir, todo estaba decidido

Porque las circuntancias le llevaron hasta ahí?... hubiera preferido continuar sin saber que Alois estaba vivo

"Me quedaré contigo Kaichi e iniciaré una nueva vida" como debía sentiré?... feliz… molesto porque es con Kaichi… celoso, pero de que si ni derecho tiene de pensar algo así… solo no con ese demonio tan peligroso… solo si no fuera el estaría cómodo

Entonces algo lo dejo asombrado… pero era muy de el, era algo tan común, aun recuerda cuando se reencontró con el aquella vez…

Porque lo abrazaba?... porque le decía aquello, no debió acercarse no debió rodearlo con sus brazos… en donde alguna vez amo estar, donde en el pasado era el único lugar en el que podía estar tranquilo

“Oh Alois… Alois… si recordaras todo me odiarías?... si supieras lo que te hice que sucedería entonces?.... Oh no mi querido Alois, no quiero que recuerdes nada, nunca recuperes tus memorias por favor… jamás me reconozcas, debes olvidarme, olvidar que hoy me conociste por segunda vez… deja a un lado mi recuerdo… crea una nueva vida que la mereces, alguien que te ame como tu alguna vez me amaste, alguien que te quiera con esa gran intensidad y que jamás pude corresponder” le miro nostálgico y de inmediato sus ojos se cerraron con fuerza para no dejar mostrar nada mas

-no me conoces y aun así me abrazas?... – pregunto intentando alejarlo un poco pero no pudo tan solo correspondió ligeramente, no podía evitarlo lo necesitaba seria el ultimo recuerdo que tuviera de ese hermoso ángel

-Fuimos grandes amigos… solo eso… pero ya no mas… si te olvidaras de mi y del arcángel Vollmond te lo agradecería mucho… no recuerdes mas nuestros nombres… olvídalos por favor – pide casi suplicante

Ya no soporto mas, sus brazos le rodearon con fuerza y su rostro se oculto por un momento en la curvatura de su hombro y cuello, solo un abrazo solo el ultimo acercamiento con el

-solo un momento- pidió en un susurro y poco después se separa de el para ver al demonio –por favor, cuídate de aquel demonio… no confíes en el… si en algún momento necesitas ayuda tan solo manda a aquel cuervo y alguien mas vendrá - le miro aun miedoso de lo que le esperaba a ángel de cabello y ojos zafiro y belleza espectacular

Sus manos subieron a la altura de su rostro y lo tomaron con delicadeza haciendo que se acercara al suyo y tan pronto como sintió su respiran combinándose con la suyo lo inclina en poco para depositar un suave y delicado beso en su frente –Gracias Alois… gracias por todo –sonrió con nostalgia, con dulzura, con tristeza y se separo de inmediato. Sentía nacer algo de sus ojos, algo que se acumulaba y pronto resbalaría en perlas de cristal liquido

Su cabello creo una sombra que cubrió su rostro, su semblante se había nublado, pero aun así aquello había corrido, una sola lagrima, jamás creyó que nuevamente las derramaría por aquel ángel de tan puro corazón
Espero que no le viera, le había dado ya la espalda

-Cuídate Alois… - el portal nuevamente se abre frente a el –hasta nunca- se despide, nunca mas desea encontrarse con el, pero si fuera necesario seria el mismo quien iría ayudarle si la situación se requería

El siempre lo recordara y eso era lo único que importaba era hora de marcharse, camina hacia el portal en donde desaparece rodeado por una oscuridad inmensa y después de eso inmediatamente se cierra…

no me conoces y aun así me abrazas?...

No le importaba no poder recordarle, le dolía el no reconocerlo, presentía que ese demonio era alguien muy importante, o que al menos lo fué en su pasado. No le importaba, no le soltaría, deseaba regalarle comfor, el mismo sentimiento con el que abrazaba a Kaichi cuando sentía su tristeza.

Fuimos grandes amigos… solo eso… pero ya no mas… si te olvidaras de mi y del arcángel Vollmond te lo agradecería mucho… no recuerdes mas nuestros nombres… olvídalos por favor

En verdad solo fueron grandes amigos? Entonces que explica el profundo dolor que sentía en el pecho? cuál era la razón de ese vacío en su corazón y la felicidad de haber encontrado un valioso tesoro al grado de tormentarlo con el deseo de derramar lágrimas agridulces?

A su tono suplicante asiente con pesar, cumpliría su petición, se olvidaría de ambos, olvidaría sus nombres, lo haría por segunda vez aún implicando lo cruel que eso era. Pero si eso era lo que deseaba, quien era él para impedirselo? Lo que quiere es la felicidad de todo aquel que este a su lado, de todas las personas que le rodean, todos los seres cercanos a Alois reciben esa bondadosa intención por parte del angel.

Agradeciendo que correspondiera a su abrazo, siendo embargado por una dulce dicha al sentir la piel del rostro ajeno en una caricia superficial, por un momento su mano tembló con el deseo de acariciar los cabellos obsidianas, de sostenerlo por la nuca y enredar sus dedos entre los mechones negro, pero se contuvo.

solo un momento

Un momento que habría deseado que fuese eterno...

por favor, cuídate de aquel demonio… no confíes en el… si en algún momento necesitas ayuda tan solo manda a aquel cuervo y alguien mas vendrá

-"Lamento contrariarle... pero siempre confiaré en él... es mi amigo, me protege como un hermano y le estoy muy agradecido por todas sus atenciones. No puedo pagar a su gentileza dudando de él... gracias por la ayuda que me brinda, la aceptaré tan solo si es realmente necesario..."

//Si no serás tu quien venga en mi auxilio entonces me niego a aceptarla...// -exclama su inconciente, rompiendo en un llanto intangible e invisible a los ojos externos.

Y luego siguió una acción por parte del demonio de orbes carmesí que lo desgarró con dulzura, el casto beso de afecto sobre su frente deja una señal tatuada en su alma, una marca que jamás se desvanecería... tan solo se olvidaría de su existencia...

Gracias Alois… gracias por todo

// Gracias a ti... que a pesar de nuestra despedida me has hecho muy feliz con tu presencia //

No sentirá más la calidez del abrazo, no le verá a los ojos ni se perderá en ese mar rubí porque el hombre le ha dado la espalda, anunciándole que el tiempo de duración de su encuentro había llegado a su fin... que aunque era muy triste de soportar, no derramó ninguna lágrima, únicamente sonrió con amargura.

Cuídate Alois…

No le volverá a ver, es su despedida, la última ocasión en que disfrutó de su compañia, un momento tan efímero pero que conservara con cariño, aun sin entender el porque de sus sentimientos, los cuales ya nunca tendrán respuesta, esas emociones serán un enigma por siempre.

hasta nunca

-"Adios Arien..."

A quien ha nombrado, de quien se ha despedido, desaparece envuelto por una neblina de sombras, una puerta que se abrió tan solo para cerrarse, enguyendolo a una destinación desconocida.

Ya todo acabó, no le volverá a ver. Nunca conocerá al Arcángel Vollmond, se quedara con la duda del conocimiento acerca de su pasado y la razón por la cual regresó a la vida.
Más no importaba, existía un ser que necesitaba de él, tal vez ese era el motivo de su resurrección.

Se lleva una mano al rostro y enjuga la lágrima solitaria que escapó en un instante el cual desconoce, esboza una sonrisa y voltea a ver a su amigo, el demonio de la venganza, caminando de regreso hasta él.

-"Kaichi, he renunciado a descubrir mis orígenes, mis memorias y mi pasado... no me importan mas, los he perdido y no me duele ese hecho. Me quedaré contigo ya que tu eres mi futuro. Volvamos a casa"

Se acerco a el y le abrazo, despues con su mano limpio la lágrima que recorria su megilla y le tomo del rostro - Alois, sinceramente creo que aun hubieses ido con el, aun siento que estarias mas seguro y....mas feliz con el y Vollmond, conmigo.....conmigo solamente corres peligro, conmigo solamente desperdicias tu tiempo, yo.....un demonio sin salvacion de su maldicion, un demonio cuya tarea nada mas trae dolor y sufrimiento a todos a su alrededor, un demonio cuyas esperanzas yacen destrosadas, solo un demonio mas entre miles...- dijo ocultando una de sus lágrimas, viendole a los ojos, no pudiendo creer que renunciara a sus recuerdos, no pudiendo creer lo que estaba pasando

"Eso no me importa Kaichi, ya tomé mi decisión y no la cambiaré por nada del mundo" -responde con sinceridad, ampliando su sonrisa- "Cuidaré de tí, y te ayudaré a liberarte de tu maldición. Confía en mi, todo estará bien" -lo toma del hombro, un gesto de fraternidad y cariño. -"Ya no tenemos porque seguir viajando, así que... puedo vivir contigo? en esa casa tan grande y tu solito... me gustaria hacerte compañia, y si no te incomoda... en la misma habitacion, pero si esa idea no te agrada con gusto puedo aceptar la habitación de huespedes, con tal de poder estar al tanto de ti me bastará cualquier sitio"

Se sorprendio ante la respuesta del angel, depues sonrio y le dio yn calurozo abrazo - Claro que no, no me molesta en lo absoluto, no sabes......no sabes lo feliz que estas haciendo a esta alma desgarrada e insebible- escondio denuevo una lágrima y despues le tomo del hombro, caminando de regreso a la casa abriendo el gran porton -dime......Alois tu....sabes como salvarme? sabes como destruir a vlad?- pregundo bajando la cabeza, dirigiendose a el salon de música donde guardaba sus tres instrumentos principales, donde habia centenares de libros y partiruras y denuevo, el retrato de su madre tocando el piano

Se quedó en silencio durante unos instantes, sabía lo que debía hacer pero no podía decírselo a su amigo, lo haría pero solo cuando eso ocurriera -"No te preocupes Kaichi, todo saldrá bien, cuando Vlad te vuelva a posesionar, yo te liberaré... pero para ese entonces falta mucho así que olvidemonos de eso por ahora... que tal si vamos a desayunar? estabas cocinando no? que estabas preparando?" -cambia de tema y semblante, sonriendole como si fuera un dia normal, ansioso por compartir un desayuno que incluyera jugo de manzana junto con su querido amigo.

Se extraño por la reaccion de este, sabia que algo le ocultaba, y por alguna razon le espantaba, esperaba que dijera que el no pudiese ser salvado

-pues, estaba por hacer lo que los humanos llaman omelet, muy simple y típico, ademas, solo cocino por diversion, como has de saber necesito otro tipo de alimento- dijo sonriente y entrando a la cocina y sacando manzanas de un canasto las cuales coloco dentrto del extractor luego cocino los omeletes agrgandoles queso con albaca y toemillo, -bien, estan prácticamente listos, ahora... devo ir arriba, necesito sangre médica, almenos para calmarme- dijo sonriente y subiendo las escaleras, /quiza..........el aya aceptado que no tengo salvacion, quiza esta conmigo para tratar de hacerme olvidar mi maldicion, tal ves este perdido/ pensaba

-"Que delicia! ya quiero probarlo!"

Exclama con entusiasmo, para cuando el otro ha cocinado lo mencionado ver con maravilla el exquisito platillo -"Que apetecible se ve Kaichi. Ve por la sangre, te esperaré para que desayunemos juntos"

Le alcanza a decir y mientras tanto prepara la mesa, pone algunos cubiertos solo para decorarla y que la mesa se viera con más vida, más alegre, luego se sienta y se pone a pensar en el modo de hacerle beber de su sangre, ya que si se hacía un corto el demonio olería su herida y es que aún no sabía cono sanarse por sí mismo.

Qué debía hacer? solo la sangre de un ángel, solo la suya, podrían alimentar verdaderamente a su amigo.

Bajo con una copa en ila mano lleno de un líquido rojo brillante acompañada de la sonrisa de su dueño, bajo a la cocina y sirvio el jugo en dos basos, luego coloco los omelets en dos platos distintos y los puso sobre la mesa -no creo que sean increiblemente deliciosos, no eh cocinado en mucho tiempo- dijo en una risita e invitando a sentar a el angel - si te desagrada ver que beba esto porfavor dimelo y solamente lo are en privado- dijo aun con la sonrisa -y porfavor..ten mucho cuidado de no cortarte- en un tono mas serio con una pisca de miedo

"Kaichi... lo sé que la sangre que en verdad necesitas es la mia..."-confiesa en voz alta, mirandole fijamente mientras esboza una dulce sonrisa -"Pero si te diera a beber de mi sangre existe el riesgo de que Vlad despierte verdad? Porque debes saber que estoy dispuesto a ofrecertela con gusto, solo te pido que seas gentil al morderme... o bien puedo hacerme un corto...esto te lo digo porque si de esa forma puedo ayudarte, lo haré sin pensarlo dos veces"

-no hay peligro de Vlad..el, esta visitando a alguien en el inframundo...sinembargo no me gustaria lastimarte......y despues de tantos años......no se si me pudisese controlar, soy débil cuando se trata de la expocicion de mi naturaleza....preferiria que no Alois, la sangre humana me calma, me trato de alimentar de su resentimiento y deseos de venganza....pero no funciona, no te preocupes, encontrare la solucion- dijo sonriendole, mirandole a los ojos, sentandose en la mesa -a todo esto......como es que sabes que necesito sangre sagrada?..........acaso tus recuerdos estan empezando a volver? o es que acaso yo te lo dije?- pregunto bastante extrañado, haciendo que las velas en la mesa se encendieran y las cortinas se abriesen -dime Alois........no as sentido algo raro en esta casa?, como si alguien nos observara?- pregunto riendo y tomando un pequeño bocado del omelete -no me escuches porfavor, devo estar loco haha tal ves todo lo que ah pasado me este afectando, sueno algo loco- dijo en una risita divertida

"Kaichi..." -solo menciona su nombre en un susurro, y sin responder a ninguna de las preguntas hechas por el demonio se levanta de su lugar y se dirige hasta donde esta su amigo, adoptando un semblante serio aparta el mechón de cabello que oculta su cuello de la zona derecha y le mira fijamente con determinación. -"Si no hay peligro de que Vlad salga entonces hazlo, y no acepto un no como respuesta Kaichi. Quiero que bebas de mi sangre, hazlo... solo hazlo, no me preguntes como lo sé ni el porqué, tan solo hazlo" -le sonrie, para infundirle confianza y realizara lo que le estaba pidiendo, y todo porque sabía que era la madre de Kaichi quien estaba cerca y que había sido ella en confesarle ese util secreto.

-pero yo.......yo puedo reaccionar.....distinto.....podria no controlarme y.....ya as dado suficiente por mi Alois, porfavor no des mas, no quisiera lastimarte me....me doleria mucho- dijo esquivando su mirada tratando de evitar el tema, aunqe.....su colmillos habian crecido un poco, y cerro los ojos como si luchase para que el brillo que comenzaba a salir de ellos desapareciese -Alois yo......reaccionaria muy violentamente, o podria no parar y desangrarte por completo, eso es algo que no me puedo permitir- le estaba convenciendo, estaba apunto de decir que si, pero decidio pararse y alejarse un poco de el, recargandose en la pared y mordiendose un dedo, dandole la espalda, tratando de ignorar su prescencia y lo que hbaia dicho, noq ueria descontrolarse, solamente unos segundos y todo estaria como nuevo y como antes, la abstinencia de sangre celestial habia echo que la parte vampirica de Kaichi se tranquilizase un poco, para que no fuese por ahi masacrando angeles como antes disfrutaba hacer, como antes que coleccionaba sus plumas mojadas en sangre y las guardaba, esos años quedaban atras, y el queria que contnuaran haci - solo para que lo recuerdes.....una ves estube a punto de asesinarte porque me ofresiste tu sangre, y por concecuencia no pude detenerme solo contigo, comenze a cazar angeles involuntariamente, era como si me hundier en un trance de carnicero- dijo aun moridendose el dedo

Ignoraba que algo tan atroz pudiera ocurrir, a pesar de que es su alimento y que solo la sangre angelical puedo darle los nutrimentos que necesita, algo tan terrible como aquello podría suceder, no volverá a insistir, de haberlo sabido no lo habría mencionado siquiera.

"Lo lamento tanto Kaichi..." -Le abraza por detrás, sollozando en silencio, arrepentido de haberselo pedido -"No lo sabía... yo... yo solo queria ayudarte pero tan solo estaba por empeorarlo todo! perdoname Kaichi, perdoname... casi... casi te obligo a cometer un crimen..."

Su abrazo se vuelve más fuerte, ocultando el rostro entre los mechones castaños de su acompañate, supliando en su mente que el otro pudiera olvidar ese episodio y pudieran desayunar tranquilamente, como si jamás le hubiera sugerido lo de beber su sangre...

La mañana ha comenzado con uns matices de angustia y dolor...

al voltearse el le abrazo, luego al abrazarlo el cuello de su querido amigo estab prácticamente en su boca, estaba rosando sus labios, acaricio la cabellera de su amigo, apartando algunos mechones, para despues hundir muy sutil y delicadamente sus colmillos, le abrazo fuerte, en espera de que pudiese suprimir el dolor, despues empezo a beber lentamente la sangre que Alois le estab proporcionando, entreabriendo los ojos, disfrutando el dulse sabor que esta tenia, sintiendo como su cuerpo reaccionaba ante ella, su agarre sobre el se hiso un poco mas fuerte, mientras empezo a beber mas rápidamente y cada ves mas, hasta que al realisarse de que pudiese desangrarlo separo sus colmilllos de la piel sedosa del ángel, lamiendo la sangre que resto, mientras sus ojos aun brillaban rojo y su boca aun se encontraba manchada de sangre -Alois.....yo.....yo lo siento....no queria.....no queria pero......no me pude contener....algo en mi deseaba beber mas y mas pero....hubo una gran fuerza, como una poderosa vos extrañamente femenina, que me dijo por dentro "basta"- dijo aun abrazandole levantando su rostro para que pudiese ver sus ojos -tengo que darte algo para que puedas recuperar la sangre, no...no te puedo dejar asi, no mientras tus poderes curativos esten dormidos, Alois, porfavor, dime que te encuentras bien- su voz era angustiada, preocupado por haberse alimentado de su amigo, sinemabrgo tambiene ra sorprendida de haber escuchado esa vos, se le hacia tanf amiliar

Le mira con sorpresa, realmente tranquilo, como si nada hubiera sucedido -"No te preocupes Kaichi, estoy bien, no me ha pasado nada..."

Tampoco él lo comprendió, estaba asombrado de todo.

Cuando el demonio le abrazó, correspondió con fuerza, ya que la culpa de haberle sugerido aquello sin conocer las fatídicas consecuencias le hacía sentirse muy mal y solo el calor que emana el cuerpo del demonio le daría alivio. No se dió cuenta del momento en que los labios del muchacho rozaron su cuello, tan solo cuando los mechones de cabello zafiro dejaron de cobijar esa zona sintió entonces algo filoso enterrarse en su carne, más no sintió dolor, solo un extraño cosquilleo electrizante.

No dejó de abrazarle al tiempo que sus orbes se dilataban por la sorpresa, había creido que su amigo había rechazado beber de su sangra para alimentarse, pero ahora le demostraba lo contrario, y solo sintió temor de que sucediera lo que su amigo le había advertido, pero si algo pasaba lo detendría a todo costo para que no se manchara las manos con una masacre.

Le escuchó con atención cuando dejó de succionar del líquido vital, se lleva una mano al cuello sintiendo como la hemorragia se había detenido pero esa zona se encontraba húmeda y caliente. Y no, en ningún momento sintió dolor, algo verdaderamente extraño.

"no te sientes débil o mareado?" le pregunto seriamente, aun abrazandolo, y saboreando el sabor de su sangre que quedaba en su boca, se limpio con su manga y le dio un pequeño beso en la megilla " sabes? te sonara extraño pero....tu sangre es increiblemente deliciosa y dulce, no e probado nada asi en años " dijo en forma de alago personal, era algo que le nacia nacer "muchas gracias por dejarme alimentarme de ti.......se que soy un parasito por el echo de alimentarme de otros pero.......no elegi mi destino, me ah sido impuesto, lo unico que me queda es sobrevivir" en un aire bastante triste y depresibo, despues llevo a Alois a la mesa, donde el omelete aguardaba ser comido por ellos, y el jugo de manzana tambien le esperaba "porfavor come, almenos....supongo que en lo que recuperas tus poderes curativos esto te ayudara a regenerar la sangre perdida" dijo sonriente y mirandole a los ojos, estaba aun en el trance de sangre

"Es extraño decirlo pero no me siento ni cansado ni tengo ningún malestar, pero admito que siento picazón en donde me mordiste" -responde cuando ya el demonio le ha llevado a sentarse a la mesa, haciendo el gesto de llevarse la mano hacia el cuello y restriega suavemente alrededor de la herida con sus uñas para aliviar esa incomodidad.

-"Si te gustó el sabor de mi sangre y visto que no reaccionaste violentamente, entonces de vez en cuando puedes nutrirte de ella, seremos precavidos y mantendremos controlados tus instintos. Me alegra de que mi sangre tenga un buen sabor, aunque a mi me disgustaría el siquiera probarlo"

Le mira con ternura, regalandole una de sus enigmaticas sonrisas -"Todo esta bien Kaichi, no me importa tu maldición, yo no te juzgaré jamás, ha sido el Destino quien te impuso este extraño estilo de vida" -fija su atención en el platillo y se muestra gustoso- "Ahora olvidemonos de eso, es hora de desayunar... Buen provecho!"

- BUen provecho-dijo en una sonrisa y partiendo el omelete, meteindose un bocado a la boca, analizando el sabor y rapidamente agarro el salero aplicandole sal al plato -que tonto eh sido, me ah faltado sal, - dijo frunciendo el seño y siguiendo comiendo -recomiendo que le pongas algo de sal, si no no sabra tan bien como deveria- dijo regalandole una sonrisa a Alois, sinembargo, en su mente solamente corria una cosa, el sabor de la sangre de Alois no se hiba, la habia disfrutado enormemente, habia sido como un despertar.....pero no sabia de que, esa sangre......le hiso recordadr y sentir cosas que habia olvidado, ahora tenia un problema, la tentacion de la sangre divina habia vuelto

"Esta bien" -responde al tiempo que prende el salero y vierte un poco del condimento sobre el omelette, luego corta un trozo y lo saborea, cuando lo ha comido exclama con emoción -"Realmente delicioso Kaichi, eres un buen cocinero. Espero poder seguir disfrutando de tus platillos, tienes un buen toque"

Dicho esto bebe un sorbo de su jugo, complementadno asi la primera impresion de su excelente desayuno.

Aun no podia dejar esos pensamientos de su mente, por un momento, sus ojos se hicieron rojos, sus colmillos crecieron denuevo, comenzo a respirar pesadamente, cerro sus manos en puño y se paro rápidamente de la mesa -Alois, disculpame porfavor...me devo retirar un momento....- salio casi corriendo, hacia el armario de su habitacion, sacando un suero de sange humana, despesperado por beberla, lo mordio y succiono toda, pero no le calmo, saco otro suero, y sigui bebiendo, nada le calmaba comenzaba a desesperarse, no debio de haber bebido de Alois, temblaba ante la desesperacion - que are ahora? que devo hacer? no.... el hambre no puede volver.......no ahora...- cerro su mano en puño y dio un gruñido, pegandole a la pared -eres un idiota Kaichi, como pudiste hacer eso, te lo prometiste Kaichi te o prometiste!!!- sollosaba en silencio, en esperas de que Alois no subiera denuevo, estaba inestable

El Angel no le siguió, respetaría ese momento de soledad que tanto necesitaba, por lo qeu se quedó en donde antes estaban desayunando, solo que no soportó el permanecer sentado y se levantó, para dirigirse hacia una ventana y mirar por entre las cortinas que cubrían el interno del sol. -"Kaichi..." -murmura el nombre de su amigo con tristeza, presentía que estaba sufriendo, y en su mente hila las esperanzas de que debe soportar todavía un poco más y luego será libre de esas cruentas maldiciones.

Si tan solo pudiera despertar como el ser celestial que es, podría hacer uso de sus poderes para seguir intentando ayudar a su querido amigo...

Bajo, con su rostro cubierto en sangre, la cabeza baja, hablando planamente -Alois.....devo pedirte, que no me vuelvas a ofrecer tu sangre y......s te intentara morder.....porfavor detenme......mi...naturaleza que tanto habia luchado para suprimir.....esta regresando, se alimento y ahora quiere mas, ira en busca de angeles o de humanos especiales....- dijo temblando un poco -prometeme, que si algun dia intentara lastimarte......me matarás o llamaras a Arien para que el lo haga- levantando el rostro, mirandole a sus ojos tomandole de las manos en señal de suplica

Veía fuera de la ventana, mirando el camino que se perdía a lo lejos hasta el cementerio, un lugar de paz donde reposaban los seres cuya alma no se encontraba ni en el Cielo ni en el Infierno, y que no habían logrado llegar al Purgatorio, pero que se quedaron en el Reino Terreste a dormir eternamente a la espera que la proclamada venida del Paraiso les despertara.

Al voltear, escuchando a su amigo bajar y presentarse nuevamente en esa habitación al tiempo que le llamaba y le decía palabras dolorosas, se llevó una mano al rostro en un gesto de espanto, a quien le pertenecia la sangre que cubrie el rostro del demonio? Éste le toma las manos y le hace prometer que le asesinara si prueba a herirle.

"K-Kaichi...." -no resiste su mirada y cierra los ojos expresando agonía- "T-te lo prometo..."

-Gracias, deverdad nol sabes lo mucho que te lo agradesco, se limpio la sangre que tenia en la boca y le abrazo -perdoname por todo esto, pero quiero encontrar una fuente de alimento alterna, no soportaria despertar denuevo, me exilie precisamente por esto pero......ahora no hay caso, devere encontrar la cura o morir en el intento- dijo tembando -pero olvidemos esto, te gustaria ir a dar un paseo or la ciudad hoy?- tratando de sonreirle, de alejar los acontesimientos tristes y dolorosos que habian pasado -tal ves podamos devolverte tus recuerdos de los humanos,- aun sonriendole

[se me seca el cerebro! T^T]

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