+*~ Achlys & Kumiko ~*+

-me siento halagada por el cumplido- dije con una sonrisa- aunque debo admitir que tu me haces sombra- sonrei, mientras me metia otro trozo en la boca- tampoco creo que ati te cueste encontrar compañia, no veo capaz a alguien de rechazarte- le sonrei.

Achlys me habia parecido una infernal realmente interesante, ademas de agradable y muy guapa, definitivamente la cita a ciegas habia sido todo un acierto

-Te mentiría si te dijera que no tengo exito con los hombres, pero tanto como hacerte sombra... ...no he sido yo la que se ha llevado las miradas de todos los del restaurante precisamente -Contestó sonriente.

Achlys se sentía bastante halagada en que un ser tan bello como Kumiko pensara que era guapa, pero lo cierto es que la demonio de la lujuria jugaba en otra liga, desde que entraron al local la joven había sido objeto de miradas de todos los comensales y personal, mientras que Achlys a su lado, había pasado desapercibida.

observe que tenia razon, ya me volvia a pasar todos me miraban, suspire- no puedes fiarte de los humanos, ellos nunca ven nada- la mire directamente a los ojos- estan ciegos- le sonrei no queria que se sintiera inferior ya que era muy guapa

Achlys se encogió de hombros y miró a la chica con cara de "si tu lo dices...". A la infernal no le importaba no ser el centro de atención de todos los humanos, pues tenía la atención de Kumiko y eso era lo unico que importaba.
Achlys siguió comiendo y pudo notar que el contenido del plato estaba ya casi desaparecido, recordandole que no había hecho ningún plan para después de la cena.

-Bueno, ¿...y que querrás que hagamos luego?

yo habia comido mas rapida que Achlys y ya habia terminado, me quede mirando como comia, sali de mi ensimismamiento al escuchar su voz-nose que te gustaria hacer? podriamos ir a bailar? o a pasear?- la verdad esque si podia seguir disfrutando de la noche con ella me daba igual a donde fueramos

Achlys aprovechó mientras Kumiko le hablaba y se acabó su plato, despues se limpió sutilmente los labios con la servilleta y le contestó.

-Preferiría lo segundo, mi don para el baile es nulo -Respondió con gracia -...creo que un paseo tranquilo será lo más adecuado.

El meseró volvió a acercarse a la pareja, su visita les dejó sin platos pero con factura. Achlys sacó unos cuantos billetes y pagó la cuenta.

- queria invitarte yo- dije con una sonrisa ya levantandome de la mesa- ahora no podras negarte a que te invite yo, a una copa o un helado lo que prefieras- salimos del restaurante, la noche ya era cerrada, no habia luna pero si muchas estrellas que alumbraban el firmamento, como bonbillas, y a la tenue luz del firmamento Achlys se veia mas guapa si cabia aun.

-No es necesario que me invites a nada, suficiente regalo es ya tu compañía -Contestó Achlys con galantería.

Lo cierto es que a la demonio no le costaba nada invitar a la joven la cena, pues todo el dinero que tenía Achlys era proveniente de las carteras de sus victimas y nunca andaba falta de éste.
La demonio puso su brazo en jarra invitando a Kumiko a que enhebrara y así pasear las dos agarradas.

me enganche a su brazo sin pensarmelo dos veces y comenzamos a caminar- no puedo dejar que me invites tu todo el rato- sonrei- ademas tu compañia tambien me hes muy grata- volvi a sonreir, ibamos paseando cerca del cementerio, estaba todo muy silencioso y tranquilo.

Todo en aquel lugar era paz y sosiego, los humanos se volvían muy tranquilos una vez morían. Achlys no pudo evitar mirar hacía el interior del cementerio, la visión de aquel mar de lápidas le hizo pensar en la cantidad de humanos y angeles que había llevado a tan fatal destino durante toda su existencia.

-Oye Kumiko, ¿tú nunca te aburres de tu trabajo? -Preguntó -...yo llevo ya dos milenios haciendo lo mismo día tras día, un festival de sangre y dolor continuos, a veces tengo la sensación de que mi vida es un bucle sin sentido...

- en ocasiones me siento igual que tu, pero luego siempre pasa algo que me alegra de nuevo- se empezo a oir a un buho Y el roce de nuestro pies, en la tierra humeda por el rocia de la noche, la bruma se extendia por el suelo haciendo una capa blanca

-Sé lo que quieres decir -Repusó la infernal con media sonrisa, podría haberle contestado que su "algo" que le alegraba el día era ella, pero no quería pasarse de empalagosa.

Achlys exploró a su alrededor con la mirada, el ambiente del lugar era bastante inusual, una extraña mezcla entre tétrico y romántico. Sin detenerse de su paseo, la demonio sacó su brazo del lazo con el de Kumiko y se tomó la confianza de pasarlo por detrás de su espalda y agarrarle de la cintura.

senti su brazo pasando por mi espalda y no me desagrado, apoye mi cabeza sobre su hombro y le sonrei- sabes no eres como el resto, hay algo en ti especial- le dije con la misma sonrisa, pensando en lo bien que estba pasando la noche junto a Achlys

-¿Especial?

Preguntó la infernal con asombro. No acababa de entender a que se refería Kumiko con esa expresión, por su sonrisa sabía que lo decía como algo positivo pero Achlys siempre se había considerado un demonio normal, tal vez era un poco mas bella que la media, pero seguro que la chica no se refería a eso.

-¿Que quieres decir con especial? -Acabó preguntando intrigada.

- claramente diferente al resto, es como un aura que te rodea y te hace especial- le sonrei- o al menos para mi- añadi sin dejar de mirarla mientras seguiamos con nuestro paseo nocturno por la cercania del cementerio bajo un manto de estrelals

Una sonrisa se dibujó en los labios de Achlys al oir la respuuesta, pero no era una sonrisa malvada como las que solía mostrar, en su sonrisa por mi primera vez había ternura. La infernal detubo su caminar y agarró a Kumiko de los hombros para ponerse frente a frente.

-Tú tambien eres muy especial para mí, Kumiko -Contestó con absoluta sinceridad mirandole a los ojos.

Achlys acercó su cara a la de la demonio y le plantó un dulce beso en los labios.

me tomo de los hombros quedandose enfreten mia y unio sus labios a los mios.
sus labios eran como la mas dulce de las ambrosias, suaves y delicados, lleve mis manos a su espalda acariciando su pelo con dulzura, tenia el mismisimo tacto de la seca colandose entre mis dedos

Viendo la positiva reacción de la demonio, Achlys se sintió correspondida y haciendole ganar valor suficiente para ir a más. La demonio llevó sus manos a la espalda de Kumiko y la abrazó acercandola más a ella, a la vez, aumentó la pasión con la que le entregaba el beso y se permitió el atrevimiento de introducir la lengua en su boca, pudiendo deleitarse mejor con el sabor de su dulce boca.

cuando el aire nos falto tubimos que separarnos, para desgracia de ambas ese beso no podia durar eternamente, la mire a los ojos y acaricia tu rostro- no pense que te gustara realmente?- de haberlo sabido la hubiera besado mucho antes, me acerque su oido- ya te dije que eras especial- le susurre para despues morder el lobulo de su oreja y volver a sus labios deleitandome con ellos y jugando con su lengua

El solo tacto de los suaves labios de la demonio en los suyos era suficiente para hacer estremecer a Achlys, pero es que el sabor de su boca era una sensación incluso mejor. La infernal perdió la noción del tiempo besando a la bella Kumiko, habría preferido ahogarse a tener que separarse de ella por un segundo, pero había algo que necesitaba decirle.

-¿Como no ibas a gustarme? Eres el ser mas bello que jamás se ha cruzado en mi longeva vida -Confesó mirandole a sus profundos ojos escarlata.

- tu tambien eres muy guapa- le sonrei, acariciando su cara con mis dedos tratando de recordar cada linea de su perjecto rostro, delineando sus pomulos y sus labios, suaves y delicados, para seguir su camino por su cuello, y enlazando mis manos en cada hilo de seda de su pelo, para despues recorrer ese camino con mis labios, bajando por su cuello, dejando pequeños mordiscos, saboreando su piel

Un pequeño suspiro escapó de Achlys al sentir los delicados mordiscos recorriendo su cuello. No estaba acostumbrada a que fuera otra quien llevara la iniciativa en estas situaciones, pero lo cierto es que le agradó muchísimo. La infernal llevó sus manos a su suave cabellera y acercó un poco más la cabeza de Kumiko a su cuerpo pidiendole que siguiera. Achlys cerró los ojos y se dejó llevar por las magnificas sensaciones que Kumiko le otorgaba.

alave su cuerpo con mis caricias, bajando lenta y tortuosamente por su cintura, bajando por sus muslos y volviendo a subir haciendo peuqeños circulos con mis dedos sobre la tela de su vestido, al mismo tiempo mis labios seguian bajando por su cuellos hasta llegar a su clavicula mordiendo y lamiendo jugaba con ella

Achlys continuaba embelesada por las expertas caricias de la infernal. Sin duda, el titulo de demonio de la lujuria lo tenía bien merecido, lo que solo eran unos roces de calentamiento estaban conseguiendo excitar a Achlys enormemente.

-Kumiko... -Susurró llevada por la excitación -...quiero hacerlo contigo...

la mire a los ojos- soy toda tuya- sonrei con malicicia y picardia, reclamando de nuevo sus labios con deseperacion y subiendo mis manos hasta su cintura pegandola mas a mi, intensificando el beso, separe mis labios de los suyos para mirarla a los ojos pero sin separar el resto de mi cuerpo del suyo